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La base predominante para comenzar a creces, siguiendo los principio de musculación es, conocer el cuerpo, conquistarlo y adaptarloEl entrenamiento funcional se
trata de una técnica de trabajo físico con base en el desarrollo del
sistema neuromuscular donde el principal objetivo es antes de todo, la
prioridad por la calidad del movimiento; en otras palabras este tipo de
entrenamiento propicia adaptaciones orgánicas en los sistemas
musculares, visando a la eficiencia de los movimientos; este método de
entrenamiento tiene como base la ejecución de siete movimientos
primarios que son utilizados por la especie humana como: agacharse,
levantarse, estirar, empujar, avanzar, bajar y girar; de esa forma el entrenamiento funcional
puede adecuarse a la especificidad de los ejercicios de musculación
basados en la realización de movimientos con buena amplitud angular y
con estímulos diferenciados para el sistema musculo-esquelético y para
aclarar, basta decir que esos siete movimientos primarios del entrenamiento funcional, originan la mayoría (si no todos) de los movimientos de la musculación.
Actualmente, el entrenamiento funcional representa
una forma de acondicionamento guiada por las leyes básicas del
entrenamiento, sostenidos científicamente a través de los estudios cuyos
resultados comprueban mejoran los aspectos neurológicos que afectan la
capacidad funcional del cuerpo, la mejoría de la fuerza, hipertrofia muscular, equilibrio, trabajar correctamente de la postura, entre otros beneficios.
Pero cuando hablamos sobre la incidencia del entrenamiento funcional y su capacidad de causar hipertrofia muscular
debemos puntualizar la calidad de movimiento relacionada a la práctica
de musculación y explicar su contribución para que esto se pueda dar.
Contribución del entrenamiento funcional a la hipertrofia
En síntesis, el entrenamiento funcional hace nuestros músculos más eficaces para la producción de fuerza en determinados movimientos.
Primero,
buscando alternativas en el área de la musculación, exactamente donde
la actividad es considerada un método convencional de entrenamiento
contra una resistencia, surgieron estas propuestas para el entrenamiento
(preparación) neuromuscular, el cuerpo sea visto como una unidad.
- El entrenamiento funcional,
como una de ellas, actúa exactamente interactuando e integrando las
estructuras corporales, mejorando la activación de las unidades motoras
de los músculos y posibilitando algunas adaptaciones importantísimas
para el aumento de fuerza.
- No nos olvidemos que la preparación
neuromuscular es un factor primordial para el incremento de fuerza lo
que, por consecuencia, facilita la hipertrofia.
En
el entrenamiento de musculación (de resistencia) cuando se visa la
ganancia de masa muscular, no es solo la carga del ejercicio la que
importa, también y la más importante la calidad en la ejecución de los
movimientos.
Lógicamente que la intensidad es muy importante, pero
esta sola podrá ser aprovechada satisfactoriamente cuando la fuerza es
distribuida correctamente por los músculos objeto de la actividad; los
culturistas ya conocen de esto hace mucho tiempo y exactamente por ello,
vemos muchos de ellos entrenando hasta el agotamiento con cargas no muy
grandes.
- Es necesario acordar ese concepto; si el objetivo es la hipertrofia, se debe entrenar el músculo y no la fuerza.
- Para
entrenar el músculo es necesario fuerza, con certeza, pero esta sola
será bien aprovechada cuando existe calidad y eficacia del movimiento.
El entrenamiento funcional
actúa de forma inteligente en nuestro organismo, por enseñar a nuestro
cuerpo a gestionar los movimientos, reclutando sabiamente las unidades
motoras necesarias a la actividad muscular, haciendo el músculo más
eficaz.
La eficacia de esa calidad de movimiento contribuye para
que la mayor parte de la energía usada sea destinada específicamente al
grupo muscular solicitado, facilitando la ejecución del movimiento y la
concentración de fuerza en el ejercicio y esto nos genera economía de
movimiento y seguridad durante el ejercicio.
- Un ejemplo típico que puede explicar esta influencia es el movimiento del ejercicio para peitoral (press).
- En
este, incontables practicantes (especialmente los principiantes),
acostumbran a realizar series con cargas elevadísimas, ejecutando
movimientos innecesarios con el hombro y con la columna para compensar
la falta de fuerza en los músculos objetivos.
- Esta es la manera
del cuerpo de socorrer a los músculos que tienen la responsabilidad de
crear la fuerza para la ejecución del movimiento.
- Sin embargo,
como resultado, no obtendremos un buen indice de hipertrofia del
pectoral, adquirimos asimetría en los brazos, y aún corremos el riesgo
de tener una lesión en la columna, codos u hombros.
Sin embargo, si el mismo practicante del press fuera adepto de un buen entrenamiento funcional,
su sistema neuromuscular reclutaría las unidades motoras adecuadas lo
suficiente para vencer la resistencia (carga), accionando correctamente
los músculos necesarios para así, realizando el ejercicio con buena
amplitud de contracción y extensión, se podría evitar hacer movimientos
innecesarios y disminuyendo el riesgo de lesiones.
No estamos
diciendo que los movimientos compensatorios de grupos musculares
sinergistas no sean válidos, por el contrario, pues estos grupos
auxilian de manera significativa las incontables articulaciones
necesarias para la práctica del movimiento principal, creando
estabilidad; sin embargo, se debe tener en mente que la estabilidad
difiere de la movilidad y, en muchos casos, el músculo (o grupo
muscular) que debería recibir el énfasis de la fuerza reclutada para la
actividad acaba no ajustando la cantidad de unidades motoras
significativas o adecuadas a la una contracción satisfactoria.
En
otras palabras, de nada sirve realizar el ejercicio del press
concentrando el gasto de energía en tríceps y hombro, olvidando que el
principal objetivo de este ejercicio es el desarrollo del grupo
pectoral.
La conciencia corporal impulsada del entrenamiento funcional
es muy importante para los atletas de musculación, principalmente por
dar al músculo un eficaz mecanismo de reclutamiento de las unidades
motoras, mejorando el aprovechamiento de energía y la generación de
fuerza, a fin de optimizar el ejercicio y la consecuente hipertrofia muscular.
Cada día son más las personas, en su
mayoría hombres, que buscan como objetivo principal en el gimnasio,
ganar masa muscular de una forma discriminada. Muchos de ellos solo quieren tener un pectoral enorme, unos brazos poderosos
y se olvidan casi siempre de sus piernas. Nuestro cuerpo necesita estar
compensado por todos lados y no podemos olvidar una parte del mismo por
poco interesante que parezca trabajarla. Hoy os vamos a enseñar la
diferencia que existe entre ganar masa muscular de manera sarcoplasmática y sarcomérica.
Cuando una persona se dedica a aumentar su masa muscular haciendo ejercicio, significa que se van a dar tres diferentes causas para ello.
- Aumentan las miofibrillas individuales.
- Aumenta la vascularización.
- Se desarrolla el tejido conjuntivo.
Se tiene entendido que el crecimiento muscular se produce cuando realizamos un entrenamiento con cargas
(peso externo al nuestro). Esto hace que algunas de las fibras
musculares por las que están compuestos los músculos se rompan. El
proceso de reconstrucción del músculo hace que estas nuevas fibras musculares generen enlaces más fuertes y duraderos que antes, dándole un mayor volumen y resistencia a esfuerzos a este músculo anteriormente maltrecho por el ejercicio realizado.
Pero siguiendo a varios autores, podremos distinguir dos tipos de crecimiento muscular o hipertrofia, no funcional y la funcional:
Hipertrofia sarcoplasmática (no funcional)
Llamamos no funcional a este tipo de crecimiento porque su fin es el
de no utilizar ese nuevo volumen muscular para realizar una acción de
carácter físico, sino más bien visual. Es el tipo de hipertrofia que buscan los culturistas.
En este proceso el volumen de la proteína no contráctil y el plasma que
se encuentra entre las fibras musculares aumenta, además de que la
densidad de estas fibras disminuye por cada unidad de superficie. Esto,
para que lo entendáis mejor, significa que aumenta mucho nuestro volumen pero no nuestra fuerza.
Este tipo de hipertofia se consigue realizando ejercicios con un peso de entre 60-75% de la repetición máxima que podamos levantar y utilizando 10-15 repeticiones. Deberemos hacer descansos de 45 segundos a 1 minuto.
Hipertrofia sarcomérica (funcional)
Este otra forma de hacer crecer nuestros músculos es de tipo
funcional porque aumentará nuestra fuerza muscular a la par que lo hace
el volumen de nuestros grupos musculares en un menor porcentaje que en
la hipertrofia sarcoplasmática. Se llama sarcomérica en relación al aumento en el número de sarcómeros
de las miofibrillas y las proteínas contráctiles (actina y miosina) en
los músculos. El conjunto de las miofibrillas aumenta en número y en
superficie y esto da lugar a un incremento de la fuerza. Se llama
funcional porque con ella queremos ser fuertes y útiles al fin y al cabo. No dejéis de conocer las ventajas del entrenamiento funcional, para que os hagáis una idea.
Para trabajar este tipo de aumento de volumen y fuerza, los individuo suelen realizar ejercicios con cargas a un 75-85% de un repetición máxima, con series de 6-8 repeticiones y descansando unos 3 minutos.
Ahora ya sabes qué tipo de hipertrofia estás haciendo en el gimnasio
según el tipo de aumento que estás notando y la forma de hacer los
ejercicios que sueles llevar a la práctica. Quizá no notes ningún cambio
en tu musculatura con tus métodos, y eso querrá decir que no lo estás
haciendo del todo bien. Fíjate bien en nuestras claves para aumentar la masa muscular, porque no todo está en hacer ejercicio, unos consejos para ganar volumen sin coger grasa también ayudará a ello.
FUENTE: http://sportadictos.com/2014/05/hipertrofia-funcional